"Lo que nosotros llamamos espíritu y alma, son dos realidades en nosotros que corresponden a los dos grandes principios creadores:
los principios masculino y femenino que llamamos el Espíritu cósmico y el Alma universal. Es por eso que, como ellos, también nosotros somos creadores. Sí, también nosotros tenemos el poder de crear, pero con una condición: que demos a los dos principios masculino y femenino existentes en nosotros mismos, nuestro espíritu y nuestra alma, todas las condiciones para manifestarse.
Las actividades que hacen de nosotros unos creadores verdaderos, son la oración, la meditación, la contemplación, la identificación. En el deseo de elevarnos para penetrar el Alma universal, esta luz que es la materia de la creación, por medio de nuestro espíritu, la fertilizamos. Entonces nuestra alma, recibe los gérmenes del Espíritu cósmico y trae al mundo niños divinos: la inspiración, la alegría, actos de justicia, de bondad y de nobleza. Éste es también el significado de la fiesta de Navidad." Omraam Mikhaël Aïvanhov